Se ha encontrado una grabación de vídeo entre los restos del avión A320 de Germanwings, según han informado en exclusiva Bild y Paris Match a la que ambos medios han tenido acceso. De acuerdo con estas publicaciones, su procedencia está fuera de toda duda.
"Se oye gritar 'Dios mío' en varios idiomas. También se oyen, al menos en tres ocasiones, golpes metálicos que dejan pensar que el piloto intentó abrir la puerta de la cabina con un objeto pesado", comentan en Paris Match. los gritos se intensifican tras una sacudida más fuerte, y luego silencio.
Además de este vídeo, existe una grabación de audio entre los datos recuperados de una de las cajas negras del avión siniestrado. Un investigador ha recopilado el contenido y a continuación compartimos la transcripción de los últimos 41 minutos del avión tal y como aparece en el artículo de Paris Match.
El avión despega.
El comandante a Lubitz: "No he tenido tiempo de ir al baño antes de despegar".
Lubitz: "Ve cuando quieras".
El avión ha alcanzado su altitud de crucero : 38.000 pies (11.500 metros).
El comandante le pide a Lubitz verificar que el avión pueda pasar a modo descenso. Lubitz obedece. Le repite al comandante por segunda vez: "Puedes ir. Puedes ir ahora".
Se distinguen ruidos que proceden del asiento: el comandante se quita el cinturón de seguridad. Se oye la puerta que se abre. El comandante le dice a Lubitz: "tú controlas ahora".
Lubitz responde en un tono que quiere ser ligero : "Eso espero".
Lubitz está solo en cabina. Cierra la puerta blindada de la cabina: Ahora es imposible que pueda abrirse desde el exterior. Luego, se le oye programar manualmente la velocidad de descenso para acelerarla y pasar de 38.000 pies (11.000 metros) a 100 pies (30 metros) en unos minutos.
El descenso comienza: el avión pierde 3.000 pies (900 metros) de altitud por minuto. El control aéreo trata, en varias ocasiones, de contactar con el avión por radio. Lubitz no contesta.
Se oye al comandante que intenta abrir la puerta de la cabina: "¡Soy yo!". Se dan varios golpes a la puerta, cada vez más fuertes. Ninguna contestación por parte de Lubitz. El comandante grita "¡Por el amor de Díos, abre esta puerta!".
Suena una primera alarma, sonora y visual: "SINK RATE, PULL UP" ("¡caída importante, enderécese!").
Ninguna reacción por parte de Lubitz.
A través de la puerta de la cabina, se oyen a los primeros pasajeros asustarse en los asientos.
El comandante pide que se le vaya a buscar una pata de cabra que tenía escondida en la parte trasera del aparato. Suenan golpes más fuertes contra la puerta, seguidos por ruidos metálicos. Sin dudas, el comandante está intentando abrir la puerta con la pata de cabra.
Se activa una segunda alarma, sonora y visual: "TERRAIN, PULL UP", ("¡Tierra, enderécese!"). Ninguna reacción por parte de Lubitz.
El comandante grita: "¡Abre esta maldita puerta!"
Se oye la respiración de Lubitz bajo su mascarilla de oxígeno. Respira normalmente. El avión está a 13.000 pies (4.000 metros).
Se oye un ruido violento que procede del exterior. En ese mismo instante, en el interior, unos gritos. El avión choca contra una montaña con el ala derecha. No se oye ningún otro sonido más que el de las alarmas y los gritos de los pasajeros.
El avión choca de frente contra el macizo del Estrop a 5.000 pies (1.500 metros de altitud) y 800km/h.